Cualquiera que haya trabajado en jardinería sabe que las plantas necesitan nutrientes para estar sanas y prosperar.
En los paisajes residenciales, la Madre Naturaleza necesita un poco de ayuda de los jardineros para reemplazar los nutrientes agotados. Debido a que las plantas tienen diferentes necesidades y existen muchos tipos de fertilizantes, saber cuándo y cómo fertilizar puede parecer intimidante.
A continuación se ofrece información básica para comprender mejor qué tipos de fertilizantes requiere su jardín.
NUTRIENTES ESENCIALES PARA LAS PLANTAS
El nitrógeno promueve el crecimiento saludable de las hojas al estimular la producción de clorofila, que es el pigmento principal que permite a las plantas convertir la luz solar en alimento. El exceso de nitrógeno dará como resultado demasiado follaje y menos flores o frutos, mientras que la falta de nitrógeno provoca hojas amarillentas, retraso en el crecimiento y flores o frutos más pequeños.
El fósforo promueve el desarrollo saludable de tallos y raíces, así como una producción abundante de flores y frutos. La deficiencia de fósforo puede provocar la caída de las hojas, tallos florales débiles y cogollos que no se abren.
El potasio, también llamado potasa, es un nutriente global utilizado por toda la planta. Ayuda a las plantas a utilizar su fotosintato y permite una recuperación más rápida de los daños causados por insectos y enfermedades o condiciones climáticas extremas. La falta de potasio puede provocar un color amarillento en los bordes de las hojas, tallos florales débiles y cogollos poco desarrollados.
Proporciones de nutrientes: La proporción N-P-K se refiere al porcentaje de nitrógeno, fósforo y potasio presentes en un fertilizante.
Si desea aumentar la producción de flores, una formulación como 12-55-6 contendrá una mayor cantidad de fósforo, lo que favorece una floración más abundante.
Para reverdecer su césped, un fertilizante con una proporción como 29-0-4 contiene una mayor concentración de nitrógeno, lo que promueve un crecimiento exuberante de las hojas.
Otros nutrientes:
Para prosperar, las plantas también necesitan micronutrientes y oligoelementos en pequeñas cantidades, que incluyen calcio, magnesio, azufre, boro, cobre, hierro, manganeso y zinc.
"Alimentación" versus "Fertilización"
La horticultor y propietaria de Variegata Studio, Denise Kelly, dice: "Es útil recordar que los fertilizantes se parecen más a las vitaminas que a los alimentos, especialmente cuando se trata de descifrar la tasa y frecuencia de aplicación".
Las plantas producen su propio alimento mediante la fotosíntesis, aprovechando la energía del sol para crear azúcares a partir de dióxido de carbono y agua.
Las plantas también requieren elementos minerales (similares a nuestros suplementos vitamínicos) para los procesos esenciales de la vida; los fertilizantes proporcionan uno o más de estos elementos esenciales. El nitrógeno, el fósforo y el potasio (N, P, K) son los tres elementos que tienen más probabilidades de ser deficientes en nuestros suelos porque las plantas los utilizan en mayores cantidades en comparación con otros nutrientes.
TIPOS DE FERTILIZANTE
Es importante determinar qué necesitan tus plantas para elegir el fertilizante adecuado. Los fertilizantes preenvasados están formulados para satisfacer diferentes necesidades nutricionales, y algunos están formulados específicamente para rosas, árboles y arbustos, hortalizas, césped o bulbos, lo que elimina las conjeturas.
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Orgánico vs. Inorgánico:
Los fertilizantes están disponibles en forma orgánica (derivados de plantas o animales) o inorgánica (fabricada químicamente). Los tipos orgánicos son mejores para el medio ambiente y ayudan a mejorar la salud general del suelo. Los fertilizantes inorgánicos no mejoran el suelo y no tienen ningún efecto residual positivo. En algunos casos, pueden ser perjudiciales para el medio ambiente y la vida silvestre, por lo que es importante sopesar los pros y los contras antes de su uso. -
Granular vs. Soluble en agua:
Hay dos formas básicas de fertilizante, cada una con ventajas y desventajas. Los fertilizantes granulares de liberación lenta tienen la ventaja de proporcionar nutrientes durante un período de tiempo más largo. Los fertilizantes solubles en agua actúan más rápido y brindan un rápido impulso de nutrientes cuando las plantas necesitan un impulso inmediato. Generalmente son menos agresivos y duran menos tiempo, por lo que deben aplicarse con mayor frecuencia.
¿CUÁNDO Y CÓMO FERTILIZAR?
La mayoría de las plantas se benefician de la aplicación de un fertilizante granular de acción lenta a principios de la primavera para estimular un nuevo crecimiento. Algunas plantas, como las especies nativas y las suculentas, requieren poca o ninguna fertilización adicional.
Factores como el tipo de suelo, el pH, la humedad, el drenaje y la temperatura pueden afectar la capacidad de una planta para absorber nutrientes. Aquí hay algunas pautas generales; Algunas plantas de estas categorías pueden tener necesidades diferentes.
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Árboles y arbustos:
La mayoría de los árboles y muchos arbustos necesitan poco o ningún fertilizante suplementario, dependiendo de la salud del suelo. Si es necesario, aplique fertilizante granulado a principios de primavera.
Utilice un fertilizante especialmente formulado para árboles y arbustos y aplíquelo alrededor de la línea de goteo. -
Plantas perennes:
La mayoría de las plantas perennes ornamentales prosperarán en suelos sanos y requerirán poco fertilizante adicional.
Cubra las plantas establecidas con 1 a 2 pulgadas de abono a principios de la primavera, o fertilice una vez en primavera con un fertilizante granular para todo uso. -
Rosales:
Los rosales son grandes consumidores de nutrientes y requieren una alimentación regular durante toda la temporada de crecimiento. Vuelva a aplicar fertilizante cada 2 a 6 semanas desde la primavera hasta el verano, según el tipo de fertilizante utilizado. Deje de fertilizar de 6 a 8 semanas antes de la fecha promedio de la primera helada para evitar daños al nuevo crecimiento.
Muchos híbridos modernos, como Oso Easy®, se pueden fertilizar con menos frecuencia. Más información: Cómo fertilizar los rosales. -
Anuales:
La mayoría de las plantas anuales consumen grandes nutrientes y se benefician de una fuente continua de nutrientes para una floración continua durante todo el verano.
Modifique las camas con abono o use una mezcla para macetas de primera calidad para los contenedores. Aplique un fertilizante granular para todo uso o un fertilizante líquido, como una emulsión de pescado, cada 2 a 6 semanas según las instrucciones del paquete. -
Verduras :
Los cultivos de hortalizas se benefician de un suelo bien enmendado y una fertilización adecuada para maximizar la producción.
Los requerimientos nutricionales varían según el tipo de cultivo. -
Frutas:
Las fresas, los arándanos, los arándanos y los árboles frutales tienen diferentes necesidades nutricionales y programas de fertilización, que pueden variar según la región.
Consulte con su servicio de extensión local o centro de jardinería para obtener más información. Obtenga consejos sobre el cuidado de las fresas. -
Céspedes:
Como regla general, aplique un fertilizante con alto contenido de nitrógeno especialmente formulado para césped en la primavera y nuevamente en el otoño.
Algunas regiones pueden variar. Deje los recortes de césped recién cortados como fuente adicional de nitrógeno. -
Bombillas:
Para los bulbos que florecen en primavera, incorpore harina de huesos o fertilizante para bulbos en el hoyo de plantación según las instrucciones. Para camas establecidas, aplique en la superficie un fertilizante para bulbos o para todo uso en otoño y nuevamente a principios de primavera cuando aparezca un nuevo crecimiento.
Las flores de verano, como los lirios, necesitan poco fertilizante adicional siempre que el suelo esté sano. Si lo desea, incorpore un fertilizante para bulbos en el suelo alrededor de las plantas a principios de la primavera. -
Semifinales:
Espere hasta que las plantas desarrollen su primer conjunto de hojas verdaderas antes de fertilizar. Utilice un fertilizante líquido suave, como una emulsión de pescado, en media dosis y aplíquelo dos veces por semana, o en dosis completa, cada 7 a 10 días. Si utiliza tierra para macetas que contiene fertilizante, no es necesario añadir nutrientes adicionales.
No importa qué tipo de fertilizante uses o a qué tipo de planta lo apliques, es muy importante regar abundantemente antes y después para evitar quemar las raíces y entregar nutrientes de manera más eficiente a la zona de las raíces.
CONSEJOS PARA UNA JARDINERÍA EXITOSA
- Es fundamental conocer la salud general de su suelo antes de aplicar fertilizante, ya que demasiado fertilizante puede ser tan dañino como muy poco. Para obtener más información sobre cómo evaluar su suelo, consulte los recursos adecuados.
- Asegúrese de quitar el fertilizante granulado de las hojas para evitar quemar el follaje.
- Agrupe las plantas con necesidades similares de luz, suelo y nutrición para que sean más fáciles de cuidar.
- Las plantas en macetas requieren riego más frecuente, lo que resulta en una pérdida más rápida de nutrientes en comparación con las plantas en el suelo. Por tanto, es aconsejable abonar los contenedores con más frecuencia, cada 2 a 4 semanas.
- Algunos fertilizantes son más efectivos cuando las temperaturas son más cálidas, pero es mejor evitar fertilizar durante períodos de calor extremo para evitar estresar a las plantas.
FERTILIZANTE ORGÁNICO
Además de los fertilizantes envasados, existen enmiendas individuales y mejoradores del suelo.
Estos son los más utilizados:
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El compost es una de las enmiendas del suelo más esenciales, ya que mejora la estructura del suelo y proporciona un amplio espectro de nutrientes y minerales. Puede ser casero o adquirirse comercialmente, e incluye abono de hongos y humus de lombriz.
El compost promueve la salud general de las plantas, aumentando su resistencia a plagas y enfermedades.
Colóquelo en el suelo al momento de plantar, o aplique una capa de 1 a 2 pulgadas cada primavera alrededor de la base de las plantas establecidas. También se puede preparar en agua y utilizar como té. El compost puede privar a las plantas de nitrógeno si no se descompone por completo, por lo que puede ser necesario complementarlo con una fuente de nitrógeno. Aprende a hacer tu propio compost en casa.
Encuentre más información sobre cómo hacer y aplicar abono. -
El estiércol consiste en desechos del ganado, incluidos vacas, caballos, gallinas, ganado vacuno o conejos. Uno de los mejores fertilizantes en general, el estiércol es rico en nitrógeno y otros nutrientes, así como en oligoelementos. Es a la vez fertilizante y enmienda, mejora la estructura del suelo y promueve un crecimiento exuberante.
Asegúrate de que elestiércol esté bien añejado para que no queme las plantas. Colóquelo en el suelo en el momento de la siembra o cubra las plantas establecidas con una capa de una pulgada en primavera. Elestiércol también se puede infusionar en agua y utilizar como té. - La harina de huesos, un polvo elaborado a partir de huesos de animales finamente molidos, es rica en fósforo y calcio, lo que ayuda a favorecer un crecimiento vigoroso, el desarrollo de raíces y numerosas flores. Aplíquelo en primavera para obtener un efecto de liberación lenta durante toda la temporada de crecimiento y nuevamente en otoño para promover el crecimiento de las raíces y las flores del próximo año.
- La emulsión de pescado, un excelente fertilizante multiuso, promueve un crecimiento exuberante, mejora la textura del suelo y favorece los microbios beneficiosos. La mayoría de las fuentes son concentrados líquidos, pero también pueden venir en forma granular. Aplique cada 2 a 4 semanas para obtener una fuente continua de alimento que no queme las plantas. El fertilizante para peces se utiliza a menudo en combinación con algas.
- La alfalfa, que a menudo se cultiva como cultivo de cobertura, también está disponible en forma granulada o en pellets. La alfalfa, una de las mejores enmiendas orgánicas en general, mejora la textura del suelo y es rica en macronutrientes, micronutrientes y oligoelementos. Contiene triacontanol, un estimulante natural del crecimiento.
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